The New Bears On the Blog

Para que tener la visión de un oso, si se pueden tener varias?. Osos de todas partes escriben su experiencia acá... cómo se vive siendo gay y oso. LAS OPINIONES ESCRITAS EN ESTE MEDIO SON PERSONALES Y NO REPRESENTAN EL PENSAMIENTO DEL RESTO DE PARTICIPANTES

lunes, mayo 22, 2006

sitges y mi sueño despierto con pedro

Me acaba de llegar este super reporte de mi amigo, corresponsal en el primer mundo y ex vecino sobre su ida a SITGES... que envidia!!!

Acá lo copio... de cortes o censura, NADA!!!. Y hasta con fotos!!!

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CREEN KE EXISTA UN LUGAR EN LA TIERRA,DONDE LA MAYORIA DE LOS
HABITANTES SEAN HOMOSEXUALES Y DE ESA POBLACION UN ENORME
PORCENTAJE SEAN OSOS, KE ADEMAS TENGA PLAYA Y SE RESPIRE UN CALIDO
VIENTO TIBIO KE CIRCULE POR SUS CALIDAS Y ADOKINADAS
CALLES CUBIERTAS DE CASITAS BLANKAS,PUES SI,EXISTE Y ESE LUGAR PARA MI
SE LLAMA "SITGES" UN PUEBLO KOSTERO UBIKADO A
106 KILOMETROS DE BARCELONA (SPAIN),AHÍ PARECE KE LA GENTE NO TIENE
PRISA, EL PUEBLO EN CIERTO MODO ES MUY HIPPIE
PERO EN SUS CALLES REINAN TIENDAS DE MARCAS DE MODA KE A LAS MODERNAS
VUELVE LOKAS.
BUENO EN AKEL TAN LINDO PARAJE,ESTE FIN DE SEMANA SE HIZO CITA "LA
JUNTA MUNDIAL DE OSOS EN SITGES" Y JUSTO
KOINCIDIO KON MI VIAJE ,KE KOINCIDENCIA NO? JAJAJA,


CREEN KE EXISTA UN LUGAR DONDE LA MAYORIA DE SUS HABITANTES SEAN
GAYS Y UN GRAN PORCENTAJE DE SU POBLACION
SEAN HOMOSEXUAL SEAN OSOS,ESE LUGAR EXISTE,SU NOMBRE ES "SITGES". UN
PUEBLO KOSTERO UBIKADO A 86 KILOMETROS DE
BARCELONA(SPAIN).SUS TRANKILAS PLAYAS ADORNAN UN PAISAJE KE ENCANTA,LA
GENTE PARECIESE NO TENER PRISA,REINA LA KALMA Y
DONDE PARECIESE SER KE TODOS SOMOS FORASTEROS,EN SUS LINDAS CASITAS DE
KOLOR BLANKO PREDOMINA LA ARKITECTURA DE KOMIENZOS
DEL SIGLOS PASADO,SUS KALLES TAMBIEN PARECEN ESTAR PLAGADAS DE
RECUERDOS KE SE INFILTRAN POR SUS ENVEJECIDOS ADOKINES.

HEMOS DECIDIDO PASAR AQUI ESTE SOLEADO DIA SABADO,LOS MOTIVOS SON
BASICAMENTE DOS,PARA MI OSO ES KONOCER A
"ANGELITA LA PERVERSA"UNA DE LAS DRAG QUEEN MAS DE MODA HOY EN DIA EN
ESPAÑA Y LA MAS INSERTA EN EL MUNDO OSUNO,
POR ALGO HA ANIMADO CUANTO EVENTO DE OSO SE HA ORGANIZADO EN LO ALRGO Y
ANCHO DE LA PENINSULA Y PARA MI EL MOTIVO DE ESTAR
AHI ERA OTRO,ESTE FIN DE SEMANA SE CELEBRA "LA KEDADA INTERNACIONAL DE
OSOS EN SITGES" KE TRADUCIDO AL CHILENO VENDRIA
A SER ALGO ASI KOMO " EL ENCUENTRO INTERNACIONAL DE OSOS EN SITGES".
POR ESTE MOTIVO EL PEUBLO ESTABA MAS MAS INVADIDO KE NUNKA POR OSOS
DE TODAS PARTES DEL MUNDO,RAZAS Y KOLORES(POR KE TAMBIEN
HAY OSOS FUCSIA,JIJI).UNA LLAMADA TELEFONICA A ANGELITA Y NOS REUNIMOS
EN LA PLAYA A TOMAR UN POKITO EL SOL,"LA PLAYA " LUGAR DESTINADO
PARA KE SUS OSITOS MOSTRASEN SUS TRAJES DE BAÑO,SUS GUATITAS,SUS PELOS
Y TODO...JAJA,ESO SI KUAL DE TODOS ANDABA KON MAS CARA
DE TRASNOCHADO Y ERA EVIDENETE ,HABIAN VIVIDO UNA NOCHE MUY INTENSA.ES
KE ESTAS REUNIONES TIENEN
TANTO PANORAMAS DE DIA KOMO DE NOCHE Y LA NOCHE ANTERIOR LA ANIMACION
DEL EVENTO ESTUBO A CARGO DE "ANGELITA" Y ESE ERA EL MOTIVO DEL POR
KE DE SU ESTANCIA AKI DE ESTA ANDALUSA (SEVILLA) DRAG QUEEN .
ELLA NOS KONTO KE LA NOCHE ESTUBO BIEN MOVIDITA ,LLENA DE
KONCURSOS,REGALOS,MUSICA Y OSEADAS VARIAS,PERO A PESAR DE ESO LA ASISTENCIA
HABIA SIDO MUCHO MENOR KE LA KE ESPERABAN.
AL KAMINAR POR LAS CALLECITAS DEL PUEBLO ME VINO UN PENSAMIENTO Y
UNA ALUCINACION A LA MENTE,MIENTRAS LAMIA MI DELICIOSO HELADO,
SOÑABA DESPIERTO, MI SUEÑO ERA BASICAMENTE UNO ENKONTRARME CARA A CARA
KON PEDRO VERAL,KONOCERLE,HABLAR KON EL,FOTOGRAFIARME A SU LADO,
NO POR KE ME GUSTE,LO ENKUENTRO MUY GUAPO,PERO NO ES MI TIPO,SINO POR
EL PERSONAJKE KE ES POR ESTOS DIAS Y SI ALGUIEN AUN NO SABE DE KEN ESTOY
HABLANDO
PASO A EXPLICARLO: "PEDRO" ES EL MISTER BEAR INTERNATIONAL 2006,UN
CERTAMEN KE SE HACE CADA AÑO EN SN FRANCISKO(USA) Y ESTE AÑO EL PRIMER
LUGAR (POR PRIMERA VEZ)
HA CAIDO EN UN OSO DE HABLA HISPANA,ESPAÑOL.PERO ESTE KONCURSO NO ES UN
KONCURSO DE BELLEZA KOMO TODOS EN ESTE VALORAN TANTO TU SIMPATIA KOMO
PERSONALIDAD Y CURRICULUM,
Y CUANDO DIGO KURRIKULUM NO ME REFIERO A KE SI HAN TRABAJADO EN LA
KONSTRUCCION O HAYAN SIDO TAXISTA,MEDIKO Y CAMIONERO,SINO KE EL CURRICULUM
SOCIAL,EL KOMPROMISO KE
HAN TENIDO KON LA KOMUNIDAD GAY Y EN ESPECIAL LA OSUNA. Y EN ESE TEMA
PEDRO TENIA MUCHA VENTAJA.
PEDRO KONTABA DETALLES DE ESTE KONCURSO Y KOMO KONSIGUIO EN
TRONO:UNA DE LAS PRUEBAS PARA MEDIR SU SIMPATIA KONSISTIA EN KE EL DIA DE LA
PRESENTACION
DE LOS CANDIDATOS,MOMENTOS DESPUES DE PRESENTARLOS TENIAN KE BAJAR DE
EL ESCENARIO Y KOMENZAR A VENDER TICKETS PARA LA RIFA BENEFICA,LO KE
LOS KONCURSANTES NO SABIAN
ERA KE ENTRE EL LOS KOMPRADORES DE TICKETS ESTABAN LOS JUECES.PERO SIN
DUDA LO KE MAS IMPRESIONO DE ESTE OSO IBERIKO FUE LA NOCHE SIGUENTE "LA
GALA" HABIA UN MOMENTO EN
TENIAN KE SUBIR AL ESCENARIO KON LA ROPA "DE ANDAR POR LA CASA" LA
MAYORIA SE PUSO SUS ARNES,ROPA DE CUERO EN PLAN LEATHER Y OTROS SE PUSIERON
MAS MODERNITAS ,PERO PEDRO
SALIO SOLO EN "CALZONCILLOS" SAKANDO ASI LA RISA DE LOS ASISTENTES PERO
FUE UNA DE LAS KOSAS KE LE DIERON SU PUNTO A FAVOR "ORIGINALIDAD".
ENTRE LAS LABORES KE SE IMPONE PEDRITO(UYS YA LE HE TOMADO
KONFIANZA Y TODO,JIJI) ES LA LUCHA KONTRA EL SIDA ,HA INSTALADO CUANTA
ALCANCIAS HA PODIDO EN BARES,RESTAURANTES,
DISKOTHEQUE Y NEGOCIOS POR TODO ESPAÑA PÀRA RECUADAR MAS FONDOS PARA
FINANCIAR A KENES PADECEN TAN MALDITA ENFERMEDAD,TAMBIEN NO PODEMOS
OLVIDAR KE ES UNO DE LOS ROSTROS DE LA KAMPAÑA
KONTRA LOS BAREBACK(KENES NO SEPAN DE KE SE TRATA,PREGUNTEN,UNA MUY
MALA TENDENCIA KE SE ESTA EXPANDIENDO POR TODO EL MUNDO) Y BUENO DESPUES
DE ESTOS MESES TAN AJETREADOS PARA ESTE FAMOSO
OSITO LOS SIGUENTES 3 MESES SE VA A SU RESIDENCIA EN IBIZA EN DONDE
PASARA ESTE TIEMPO PARA LUEGO SEGUIR DEFENDIENDO Y TRABAJANDO KON SU
KORONA,BUENO HABRA KE IR A TAN PARADISIAKA ISLA
PARA VER SI KONSEGUIMOS UNA FOTO KON EL Y POR SU PUESTO VER SI ES TANTO
KOMO PARA SER EL MISTER BEAR INTERNACIONAL 2006.


ARI2006

domingo, mayo 21, 2006



Billares

En Australia hay una gran afición al juego del billar. Raro es el pub o bar que no cuente con al menos una mesa de este juego de bolas, tacos y agujeros. En los bares de ambiente gay tampoco faltan las mesas de billar, así que no es nada raro ver a los gays, muchos de ellos osos, armados con el taco y tratando de meter las bolas en el agujero.

Yo nunca he sido aficionado al billar, pero frecuenté billares cuando joven. Casi a diario iba a una pequeña sala de juegos que había en mi barrio de Sevilla. Allí nos reuníamos los amigos para echar una partida de billar, futbolín o de máquina Petaco o flippers, que es como entonces llamábamos a las pinballs. Éramos amigos y vivíamos en el mismo barrio donde me crié, compañeros de colegio y algunos también vecinos del mismo bloque de pisos. Teníamos esa sana camaradería de nuestros años adolescentes y compartíamos muchas cosas, desde el bocadillo de mortadela de la merienda a los cigarrillos sueltos que comprábamos en el quiosco. Fumábamos y después de cada calada al pitillo, casi compulsivamente y al unísono, escupíamos saliva entre los dientes. Eso nos parecía muy de machos. Nos intercambiábamos o nos jugábamos estampas de futbolistas y hablábamos de tebeos (comic), de fútbol, de cómo nos había ido el día en el colegio y de lo mamón que era Don Jacinto, el más odiado de los maestros de nuestro “cole”. También hablábamos de sexo y de los cambios que estaban sufriendo nuestros cuerpos, casi siempre exagerando y, por supuesto, independientemente de lo que de verdad nos pudiera gustar, hablábamos de chicas, de lo buena que estaba tal chavala, aunque por la edad era más imaginación que conocimiento. A veces la conversación acababa en erección, cosa que, al menos para mí, era lo más divertido, ya que el siguiente paso era la paja y, como la cabra siempre tira al monte, incluso desde joven, algunos nos las ingeniábamos para que la paja no fuera solitaria. ¡Bendita edad!

Años después, al final de los 70, de vez en cuando me daba una vuelta por el Café Madrid, unos billares que había en la calle Sierpes de Sevilla y que no tenían la inocencia del billar de mi barrio. En esos billares se reunía una variopinta fauna y, como ya decía en una anterior entrada de este blog titulada “Tatuajes”, entre los asiduos del local estaban muchos jóvenes chaperos que mercadeaban con sus cuerpos y homosexuales que acudían a comprar carne. Aunque los años de posguerra ya quedaban lejos, no debía ser muy diferente al ambiente del billar que retrata Cela en “La colmena”, donde los personajes homosexuales de la novela, Don Julián “la fotógrafa” y “El Astilla”, iban a los billares “a ver posturas”. En la zona de billares del Café Madrid era frecuente ver a los jóvenes chaperos jugar en las máquinas Petaco y alrededor de ellos a algunos “carrozas” pendientes del movimiento de las bolas, que parecían ser impulsadas por la pelvis del chulo más que por los flippers. Algunos no iban sólo “a ver posturas” sino a llevarse a algún “posturitas” a una de las pensiones cercanas y olvidarse por pocas pesetas de la penuria, de la homofobia y del ambiente cutre y casposo que se vivía en aquellos años.

Estos billares de Sevilla también eran frecuentados por jugadores “profesionales”, tipos que se pasaban allí todo el día jugándose el dinero. Sobre el tapete de las mesas se podían ver las apuestas y, en alguna ocasión, vi cantidades de dinero que en aquella época me parecían importantes, con billetes del color del tapete. Ninguno de estos “profesionales” se parecía a Paul Newman en “El buscavidas”. La apariencia de estos buscavidas era la propia de los residentes de los barrios más marginales de la Sevilla de entonces. Los dedos que utilizaban para apoyar la parte delantera del taco a modo de arco estaban amarilleados por la nicotina, las uñas sucias y largas, especialmente las de los dedos meñiques, y sus ropas baratas tampoco estaban en muy buenas condiciones. Sus prematuras arrugas reflejaban la penuria de sus vidas. El alcoholismo, la marginalidad, la falta de trabajo fijo y, en algunos casos, sus antecedentes delictivos hacían que fuera casi imposible salir de ese modo de vida. Algunos lucían grandes anillos o pulseras esclavas de oro, probablemente compradas a algún ditero que les cobraba intereses usureros o eran joyas recibidas como pago por servicios poco legales. Si te acercabas a ellos por la mañana cuando estaban recién levantados, aunque no se hubieran duchado, olían como si se hubieran bañado en colonia barata comprada a granel. Entre los “profesionales” del billar había un hombre que me llamaba la atención por lo grueso que estaba. Tenía que presionar su blanda barriga sobre las bandas de la mesa para poder llegar con el taco a la bola. No se parecía en nada a “el Gordo de Minnesota” (la foto en blanco y negro), papel interpretado magistralmente por Jackie Gleason en la película “El buscavidas”. El compañero de reparto de Paul Newman era mucho más elegante.

Los trileros, los “profesionales” del timo de “¿dónde está la bolita?”, también frecuentaban el billar de la calle Sierpes. Después de haber pegado el sablazo a algún guiri, a algún pueblerino o a algún “enterao”, que pensaba que sus ojos eran más rápidos que las manos del trilero, se repartían los beneficios en algún rincón de los billares. Solían ser muchos a repartir. El negocio necesitaba mucha gente: trilero, ganchos, avistadores y una gran caterva de gente que garantizaba la integridad física del trilero si un “primo” estafado se rebotaba. Las herramientas del negocio eran pocas: unas bolitas de papel, unos pequeños cubiletes o chapas de cerveza, aunque algunos también usaban naipes arqueados a lo largo, y una caja grande de cartón vacía. Y como local, toda la calle Sierpes. A veces se les veía entrar en tropel por la pequeña puerta lateral de los billares que daba a la calle Rivero. La precipitada entrada era debida a que alguno de los avistadores se había percatado de la presencia de algún policía municipal aproximándose al negocio y había gritado “¡agua!”. Cuando pegaban algún palo, y antes de que el incauto reaccionara, el trilero y sus “socios” huían corriendo, cada uno por alguna de las bocacalles de Sierpes, pero al final el “consejo de administración” se reunía en el billar.

Como ya habréis observado, los amigos que aparecen en la foto con la que ilustro esta entrada, fotografía que hice hace poco en una fiesta del Club Bear de Sydney, tienen un “look” infinitamente mejor que los buscavidas que he descrito de la Sevilla de mis años juveniles.

lunes, mayo 15, 2006

Para pensar...

Aprovechando tres cosas:
  1. Que estamos muuuuy flojos para escribir acá,
  2. que encontré este artículo en varios sitios, y
  3. las ventajas de copy/paste.

Transcribo este artículo que he visto en varios sitios... seguramente ya lo han leido. Para quienes no, aprovechen... y dejen el comentario!!!!
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OSOS DESPLUMADOS
Por Javier Sáez

La comunidad bear, que surgió como reacción contra un modelo de cultura gay estandarizado que excluía otros cuerpos y otras formas de deseo, corre el riesgo de convertirse a su vez en una cultura excluyente. Y lo que es peor, aliándose con el régimen que produce la mayoría de los procesos de marginación y odio homofóbico: el régimen heterosexual.
Escuchamos cada vez más en boca de muchos osos expresiones como "la pluma no tiene cabida en nuestra cultura", "somos gente normal, no como esas locas afeminadas", "lo nuestro es la masculinidad natural", etc... Sólo les falta decir que los osos en realidad somos heterosexuales que por accidente follamos con hombres. ¿Ahora resulta que la cultura de los osos es el retorno del hombre de verdad, el de la copa de soberano y la faria, que lee el Marca mientras se rasca los huevos antes de golpear a su mujer? La plumofobia que se respira entre algunos osos (no todos, por suerte) supone una alianza repugnante con lo peor del machismo y la misoginia ("en nuestros bares no entran chochos ni locas") que caracteriza la cultura dominante, es decir, hetero, y en el fondo no es sino otra forma de homofobia.

Además, esa posición de "somos normales" olvida que el mundo hetero va a seguir aplicando su régimen, va a seguir considerándonos unos degenerados, una cosa rara, o como mucho algo exótico, para dar un toque pintoresco en los programas de la tele. Querer ser normal, o incluso querer ser un hombre, con todo lo que eso implica, me parece una aspiración de lo más triste. Aunque parezca que los heteros te "aceptan" en su mundo cuando te felicitan encantados "porque no se te nota nada" (o sea, "porque no pareces un maricón de mierda, a los que no soporto"), parece que algunos olvidan que el oso en realidad es una monstruosidad ontológica, y en ello reside su gracia y su potencia subversiva. Somos monstruos porque un hombre de verdad, como dios manda, natural, normal... es hetero, folla con tías. Y el oso, mal que le pese a alguno, es maricón de arriba abajo. Y ahí vienen los problemas para el cerebro binario hetero: "pero ¿cómo es esto?, un tío fuertote, peludo, barbudo, de 120 kilos, mas basto que un arado... ¿folla con otros tíos?" ERROR. FILE NOT FOUND. WINDOWS DETECTÓ UN FALLO EN EL SISTEMA. PLEASE, RESET. Los heterocircuitos del chip homófobo empiezan a echar chispas, humo, y revientan. Y esa es precisamente nuestra ventaja y nuestra conquista, nos gustan los rasgos masculinos y viriles, pero sabemos que eso es tan artificioso como cualquier otra identidad, y lo ponemos en cuestión precisamente con algo tan contradictorio como soltar pluma, algo que, por cierto, hacen muchísimos osos. Rompemos el estereotipo de lo que significa ser hombre, y eso es tremendamente subversivo: "sí, somos como tú de viriles, pero resulta que somos maricas, nos gustan los hombres y además podemos chillar como la que más o hablar en femenino si nos da la gana". Se trata de aprovechar la potencia performativa de nuestra posición paradójica para desmantelar el dispositivo binario de sexo y género que regula nuestras vidas y produce los odios y las persecuciones. En efecto, muchos osos tenemos pluma, o nos encanta que la tengan otros osos, o nos podemos travestir si nos apetece, o podemos bailar con más contoneos que Shakira, porque no hay ninguna masculinidad esencial que reivindicar o proteger, eso es una ficción hetero. La masculinidad y la feminidad son posiciones vacías, que no se corresponden con los hombres y las mujeres. Por eso mismo hay también masculinidades sin hombres, como demuestran muchas subculturas lesbianas (drag-kings, butchs, camioneras, las garçonnes francesas de los años 20, las lesbianas leather, etc.). Judith Halberstam ha estudiado todas estas subculturas en su fascinante libro "Female masculinity", libro muy recomendable para los que todavía piensan que lo masculino es "cosa de hombres".

Esta paradoja está vinculada a otro de los tópicos de la cultura osuna: somos naturales. Vamos, que los osos acabamos de bajar andando de los Picos de Europa. Pero resulta que en vez de miel tomamos cerveza, éxtasis, popper, ghb, coca o ketamina, y en vez de ir desnudos, vestimos camisas a cuadros, vaqueros, cinturones, botas, gorras, tirantes, nos recortamos cuidadosamente la barba y la perilla, nos afeitamos la cabeza, nos tatuamos... Curiosa naturaleza. Somos una subcultura que juega y disfruta con los rasgos de la masculinidad, pero de ahí a creerse que ésta existe como algo "natural" hay un peligroso paso. En realidad esta palabra encierra otra trampa: la palabra "natural" significa heterosexual. Para el código hetero, los hombres "de verdad" no se cuidan, no se ponen camisas de licra, no se pintan, no llevan tacones, no chillan, no lloran... es decir, son "naturales" (pero ojo, tampoco follan con tíos, eso es "antinatural"). El problema es que la artificiosidad con que se construye el hombre "de verdad" no se ve, es una omisión. Es silenciosa, muda. Supone controlar sus gestos (¡esas manos!), sus voz (no grites!), sus ojos (no mirarás el paquete ajeno), su cuerpo (¡esas caderas!; los hombres deben bailar con la movilidad del robot R2D2, como mucho).

Lo importante del código "natural" es obedecer a esa ley según la cual los hombres no hacen cosas raras con su cuerpo ni con su vestimenta. Ese "no hacer" es lo masculino, y en realidad se basa en "controlar". Pero ese mismo el dispositivo es tan artificial como la pluma. Lo que uno aprende desde pequeño - todos los niños varones-, es a reprimir y controlar cualquier gesto, voz y deseo que pueda revelar "afeminamiento". Y si uno es marica, aprende mucho más rápido a reprimir esos signos externos, hasta el punto de que a veces me pregunto si la masculinidad excesiva de que hacemos gala los osos (esa voz grave, esos gestos torpes, rudos y bruscos, esos abrazos golpeándonos las espaldas con fuerza, esa exhibición del vello corporal) no son sino una consecuencia de ese aprendizaje "quenosemenotequesoymarica" generado por el terror infantil a ser descubierto. Ya se sabe, lo peor en un colegio es ser el niño mariquita. Para disimular algunos aprendimos demasiado bien el código y nos hemos pasado. Y por eso hablamos aquí de traición: los niños proto-osunos sobrevivimos en la escuela y en el instituto con nuestros gestos machirulos y nuestra barba precoz. "Pasamos" por hombres de verdad, algunos incluso jugábamos al fútbol. Los niños menos obedientes, o peor adiestrados, de pluma incontrolable, perecieron en el intento de ser normales (o ni siquiera lo intentaron, en un gesto que les honra), se convirtieron en niños mariquitas, y sufrieron el escarnio, la humillación, el insulto y la violencia. La misma violencia que está detrás de frases como "entre los osos no tiene cabida la pluma".

¿Los osos plumófobos están orgullosos de colaborar con ese exterminio? ¿Cuál será el siguiente paso hacia la normalidad, quedar con neonazis para ir juntos a apalear maricas a los parques? Los osos estamos ahora en esta encrucijada política: podemos reivindicar la diversidad, disfrutar de la pluma y cuestionar la homogeneidad que supone "lo normal", o podemos aliarnos con el enemigo en su cruzada heterrorista en defensa de la masculinidad "natural".

Nota
(*) Javier Sáez (Burgos, 1965) es sociólogo y traductor. Es autor del libro TEORIA QUEER Y PSICOANÁLISIS, y coautor de los libros EL EJE DEL MAL ES HETEROSEXUAL y TEORIA QUEER: POLITICAS BOLLERAS, MARICAS, MESTIZAS, TRANS. Ha prologado y traducido con Beatriz Preciado el libro de Judith Butler LENGUAJE, PODER E IDENTIDAD, y con Paco Vidarte EL PENSAMIENTO HETEROSEXUAL de Monique Wittig. Es el responsable de la revista electrónica queer www.hartza.com. Es el coordinador, con el fotógrafo Antino, de la campaña OSOS CONTRA EL SIDA: PELOS SÍ, A PELO NO (www.antinoo.com). Actualmente trabaja en el Fondo Social Europeo.